La ocurrencia de grandes señales en este tiempo anunciarán que estamos entrando en una nueva dispensación

La versión Reina Valera en Efesios 1:10, 3:9 traduce la palabra dispensación del griego oikonomia que quiere decir “mayordomía” y cuyo significado está relacionado fundamentalmente al gobierno de una familia, o de los asuntos de una familia. La Biblia de Scofield define dispensación como "un período de tiempo durante el cual el hombre es probado con respecto a alguna revelación específica de la voluntad de Dios". Por otro lado, el diccionario bíblico define la dispensación o dispensaciones, como: “El trato ordenado con los hombres por parte de Dios en la variada administración de sus caminos en distintos tiempos”. Al respecto el comentario bíblico Vine aclara enfáticamente que “una dispensación no es un período ni una época (uso común, pero erróneo de la palabra), sino un modo de tratar, una disposición o administración de los asuntos”.

 

Tomando en consideración estas definiciones, nos damos cuenta que el Dios Eterno en el transcurso del tiempo no ha tratado con el hombre de una misma manera, y este trato ha dependido del nivel de revelación que el Señor ha dado a su pueblo en relación a sus verdades eternas.

 

Los estudiosos de las Sagradas Escrituras que dividen los distintos tratos del Eterno con el hombre a través del tiempo, dicen que actualmente estamos en la dispensación de la gracia Efesios 2:8 y ellos identifican siete diferentes dispensaciones a saber:
1. La Inocencia
2. La Conciencia
3. El Gobierno Humano
4. La Promesa
5. La Ley
6. La Gracia
7. El Reino

 

La dispensación perdidaEn el intento de interpretar los tiempos y las dispensaciones señaladas en las Sagradas Escrituras, la mayoría de los estudiosos coinciden en que han observado las siete dispensaciones mencionadas con anterioridad. Según este análisis, actualmente estamos en la sexta dispensación y la próxima será la del milenio y que fue profetizada por Juan el apóstol en Apocalipsis 20:4. Sin embargo, nosotros hemos recibido revelación de una nueva dispensación que el Dios Eterno trae para nuestros tiempos (estamos en los tiempos de transición) y que ya estaba profetizada para que aconteciera antes del milenio Apocalipsis 10:7, 11:15. Esta dispensación que anunciamos no significa el fin de la gracia sino su perfección, pues el Eterno, en el trato con nosotros su pueblo que está en las naciones gentiles, inicia un nuevo tiempo de reformas, de restauración de pactos y de mayor gloria.

 

La dispensación que nosotros llamamos perdida, pues ha sido ignorada por los teólogos, está fundamentada en los escritos de los profetas, entre ellos Jeremías, Ezequiel, Joel, Daniel, Zacarías y en el libro de Revelaciones o Apocalipsis y no es que nosotros hayamos hecho interpretaciones personales sobre algunos textos de los libros proféticos antes mencionados, sino aclaramos que esta palabra nos ha sido revelada por nuestro Padre y Dios Eterno.